ABRA PSICÓLOGOS BILBAO
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Muchos trastornos del sueño se presentan junto a otros trastornos, y por ello pueden terminar agravando el problema principal. También pueden ser el inicio de trastornos de mayor importancia, por lo que hay que tratar de detectarlos lo antes posible y poner soluciones.
No hay una edad fija en la que podamos determinar que un niño padece un trastorno del sueño.
No es tan infrecuente encontrarnos trastornos en el sueño de un lactante, y generalmente podemos considerarlos desajustes normales propios de esa etapa del desarrollo. Existen variaciones importantes en cuanto al número de horas de sueño que un bebé necesita. Podríamos hablar de entorno a 15-17 horas al día.
Durante los tres primeros meses, es frecuente que el bebé sufra frecuentes interrupciones nocturnas, pero poco a poco se irá estabilizando su ciclo de sueño, sin que esto constituya ningún problema.
El trastorno como tal, aparecerá cuando el bebé duerma períodos de corta duración, seguido de despertares frecuentes y con lloros. Además del sufrimiento para el pequeño, la vida familiar se verá alterada de forma considerable.
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